Mi paciente cambia de motivo de consulta todas las semanas ¿Qué hago?

julio 26, 2017

Primero tengo que saber cuál es el motivo de consulta original, para esto debo volver a los primeros 5 minutos de nuestra primera entrevista y así obtener la queja planteada por el consultante. Una vez que tengo la queja – que representa lo que trae el paciente y que suele no ser trabajable – debo tomarla y trabajarla con el paciente para co-construir un problema resoluble y así obtener el motivo de consulta. En otras palabras, podríamos elaborar la siguiente ecuación:
Motivo de consulta = queja + co-construcción del problema
Y ¿cómo obtengo la co-construcción del problema?, la siguiente formula nos da la respuesta:
Co-construcción del problema = queja + soluciones intentadas + por qué ahora
Ahora que tengo mi motivo de consulta original, el cual me indica cuáles serán mis objetivos terapéuticos, es decir qué trabajaremos, también puedo definir cómo lo haremos, en otras palabras, puedo determinar cuáles serán las intervenciones pertinentes para lograr los objetivos. Una vez que tengo este plan claro, cada vez que el paciente brinda un nuevo tema a trabajar, mi misión está en preguntar:
¿Qué tiene que ver esto con lo que te trajo a consultar?
¿Cómo se relaciona esto con lo que nos reúne?
De esta forma, cada vez que aparecen nuevos temas, podemos maniobrar de tal manera que indagamos en cómo impacta lo expuesto en el motivo de consulta, sin desviarnos del camino a seguir, ni dejando de escuchar al consultar.


Comments

  1. Catalina echavarri - agosto 25, 2017 at 12:43 pm - Responder

    Muy claro y práctico el artículo!
    Felicitaciones


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